Un rincón del bosque de Sajambre (León), en la que el color verde llega casi a deslumbrar. Se trata de un día muy húmedo en el que estamos metidos en una lluvia intensa, que en muchos casos es doble, ya que cuando soplaba el viento, el agua se precipitaba de las hojas de los árboles como si de chaparrones se tratase.
lunes, 23 de junio de 2008
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